jueves, 26 de abril de 2012

Parece que esta semana viene de mal en peor.
Cada día es una sensación distinta pero similar.
Es horrible esto que me anda pasando. Siento que mi mente es la que está llena de palabras, pero de sentimientos verdaderos no.
Que esa persona la cual me hace/hacía bien, solamente me llena/ba cuando me "habla" con palabras, oraciones, pero al tenerla a mi lado, en frente mío, no llega a transmitirme lo que dice sentir por mí. Lo que yo pienso que logro hacerlo sentir. 
¿Qué me hace sentir, pensar todo esto? No sé, siento dolor. Un vacío enorme que se me mete por dentro. 

miércoles, 25 de abril de 2012


Ya no quiero mañanas nubladas. Es mi momento de despertar con mis propias ganas de sonreír.
Ya no espero más nada, por lo menos por hoy, y por los días siguientes. Es hora y tiempo de ocuparme
solamente de mí misma. No quiero depender, no quiero aguantar, no quiero desear, ni esperar.
Hoy quiero empezar a retomar mi persona. Que no me influyan más actitudes, reacciones absurdas, ni palabras vanas inservibles. Quiero que deje de afectarme todo esto, de atarme, de hacerme mal. Quiero alejarme, despistarme, perderme, respirar otra vez limpiando mis pulmones de la energía oscura que ando consumiendo.
No es que ando súper decaída ni nada parecido. No es depresión, eso ni hablar. Pero bueno, a veces hay altibajos que desnivelan un poco. Desanimantes. Frustrantes. Etapas, ciclos, momentos que aparecen de frente y no queda otra que aguantar y avanzar a la vez, lástima que a veces se siente como si los pasos fueran hacia atrás. Ya no sé cómo hacer. No "qué hacer", no sé de qué manera hacer lo que deba hacer. Como si tuviera una fórmula que no quiere mostrarse, como si no pudiera descifrarla. Prefiero no actuar más y permanecer quieta, inmóvil de actos y palabras. Hasta acá llegó esto.

domingo, 22 de abril de 2012

Tengo que cambiar YA  por más que cueste.

sábado, 21 de abril de 2012

Sin razón


Esa clara luz empezó a parpadear. Ya no se alimenta de calor.
Y se consume más rápido de lo normal.
Similar a una vela en una cena romántica
la cuál está en una ocasión especial
pero sabe que su tiempo va en retroceso.
Luz perdida, luz que no guía, luz que no calma.
Y así están las sensaciones, titilando,
prendiéndose e intentando permanecer encendidas.
Pero se sienten a oscuras. Vacías. Dolidas.
Se sienten erróneas. Entre arrepentidas y fallidas.
Sin fuerzas sienten cada vez más debilidad.
Sin apoyo, sin comprensión.
En un mundo que de a poco va perdiendo una de las razones que había hallado tiempo atrás.

jueves, 19 de abril de 2012

Sin título

[Entrada escrita en el día de ayer]

Y bueno otra caída más, ¿qué más da? Otra vez lo mismo. Ver lo feo que es cuando alguien pareciera ser que jamás te entendió una palabra. Que jamás entendió las advertencias, esos carteles que uno lanza diciendo “te estoy diciendo esto para que no me lo hagas”. Esos avisos que resultaron invisibles. Y sí, si fueron vistos por los mismos ojos que tenían falsedad.
Volver a sentirse fallida. Sentir de nuevo que fui como una nena ingenua recibiendo caramelos de un desconocido. Qué horrible es cuando pones a alguien en un lugar especial, por considerarlo “distinto”, por sentir que tenía valores parecidos a los de uno mismo y te termine fallando.